viernes, 19 de agosto de 2011

Y Defensa



Saliendo de mil horas de laburo en una producción en san telmo uno se topa con cosas como lo que vemos en la foto. San Telmo es un barrio que me puede. Me encanta. Es sucio, horrible, inseguro, pesado (todos te ofrecen comer, te llenan de volantes y te dicen de todo sólo por caminar por humberto primo) pero surreal.
No hay vez que haya estado por esos pagos sin que me haya pasado algo fuera de lo ordinario, de los cotidiano, del dulce de leche con mendicream.
Caminaba por Chacabuco con un colombiano y un panameño, quienes se sorprendieron al ver cómo porteños revolvían la basura en búsqueda de curiosidades. Y le tuve que dar a Emerson la razón. Nos encanta todo lo gratis. 'y bueno, el otro día cae mi hermana con un portafolio onda maletín de los cincuenta' y lo trajo a su casa, cuenta meche, amiga de la productora. Y qué manía de recolectar cosas que no necesitamos. Caminar por porteñolandia es encontrarse con colchones en la vereda, cajas con juguetes, cartas rotas de amores no correspondidos, yerba mate usada, cómodas de poco barniz y hasta marcaganado con forma de M. lo puedo jurar sobre una donat.
Pero ayer, no fue nada de eso. FLORES, caramelos, y un portaespejo rosa. Veniamos bajando la cuadra. nos frenamos y me di vuelta a mirarla. No es para tanto, dice Emerson, le dejó flores a su amada y se fue, dice, inexperto. Esto es más. Esto es odio. Lo toqué y me arrepentí. No hay siete vueltas al reves y palabras para repetir. Podría haber sido una gallina, podría haber sido un muñeco, un ajo.
Claro, y el ibuprofeno, los mapuches, el diablo, y de amuleto... se ríe emerson, gualicho dijiste?

2 comentarios:

(a)nónimo. dijo...

y que tiene que ver esto con el dia internacional de la fotografía?

Belen Oda Marty dijo...

obviament nada, cambié el topic. lo dejé para el dia argentino, el 21 de sept.