sábado, 4 de mayo de 2013

ella le pidio que la llevara al fin del mundo

me hice un rodete a medio hacer, sin gomita, me puse una hebilla para el flequillo y empecé a escribir. me acordaba de esa noche. esas noches que cuando alguien te pregunta, y por qué no me contás una anécdota, te acordás de esa, justo de esa noche.

me había puesto unos tacos, medias negras no muy opacas y un vestido atado en la cintura por una cintita que encontre por ahí. media cola en el pelo con una hebillita verde de mariposa. me pasó a buscar en un auto gris, de esos que no podés acordarte la marca. pensé recién, uno de esos comunes, que tienen unos cuatro, cinco años. me agarró una puntada en el corazón. debe ser que tuve un soplo en el corazón de chiquita que me repercute ahora. si, claro. no es que me muera de ganas de verlo.

tardé dos tragos en enamorarme y tres llamados en desenamorarme.

marqué tu número sin quererlo. pensé tu nombre mientras rompía tu recuerdo en tres tequilas. saque el primer pasaje a la intemperie del primer hombre que me invitó a salir. y aun así, acá estoy. con vos, sin vos.

te espero,

yo, las tres aeme.


1 comentarios:

martin dijo...

Te deseo lo peor.
Vos para mi estas muerta.